En 1977, cuando fundé la sección española de SURVIVAL, me hice esa misma pregunta pensando en los más de 30 grupos de indios aislados que todavía vagaban por las selvas amazónicas, arrinconados y perseguidos por el hombre blanco. Entonces había 1500 huaos, o aucas bravos, como se los conocía en Ecuador, que se defendían a lanzazos matando a todo el que se adentrara en su territorio, entre otros a mi amigo y padrino de mi hija Taisha monseñor Labaca. En los 90 fundamos Watu Acción Indígena y participé en la creación de Empresa y Sociedad, una fundación que lucha por una empresa mas solidaria con la sociedad donde está inserta. Siempre esa pregunta rondaba en mi cabeza: ¿de verdad servimos para algo?
Pienso que si no somos críticos con nosotros mismos, con nuestras ideas y nuestros comportamientos, ¿cómo vamos a poder ser críticos y coherentes con la lucha que mantenemos por transformar la sociedad, con nuestro granito de arena? Nadie pensaba que las 5.000 culturas que conforman 300 millones de indígenas iban a mantenerse vivas y pujantes en el siglo XXI y sin embargo aquí estamos, con un poderoso movimiento indígena presente en organismos multilaterales, intentando que se cumplan las leyes y convenios internacionales, y con todavía algunos grupos aislados voluntariamente preservando sus formas de vida.
Por eso mismo ahora, un año después de que este periódico haya sembrado la importante semilla de Mestizaje, también me pregunto: ¿hemos sido útiles a la sociedad española? Mestizaje es el único suplemento de la prensa diaria de nuestro país dedicado enteramente a la cooperación y a la preservación del medio ambiente, y nuestra voluntad es impregnar y dar valor a nuestros lectores desde un punto de vista comprometido.
Diario 16 se moja con Mestizaje y todos nos mojamos en la sociedad que nos ha tocado vivir, informando con rigor pero convencidos que podemos, y tenemos la obligación moral de transformar los valores de nuestra sociedad.
Un periódico es una idea, una idea necesaria para trasformar la sociedad o hacer el juego de los poderosos. Nosotros pensamos que tenemos que hacer el juego de la sociedad civil, de los seres humanos, reivindicando unos valores que otros quieren aniquilar, para convertirnos en meros consumidores y usuarios, olvidando la profunda esencia del ser humano.
Mestizaje es una bola de nieve imparable, porque todos llevamos dentro esa semilla, que nos inquieta y nos preocupa y que encuentra en este suplemento su foro y su incubadora.
Mestizaje no sólo es útil sino necesario para toda la sociedad española. Nuestro periódico está ya contaminado de la filosofía de todos los que trabajamos en esta nave humana y positiva. Esa confianza y ese deseo hace que compartamos con millones de personas en nuestro país unos mismos valores e ideales que den sentido a nuestras existencias.